Alegría de vivir de una centenaria

La alegría de vivir ha sido el mayor secreto de la centenaria quemadense Ester Morales Abreu, para llegar a los 101 años vividos.

Por eso, en la celebración de su cumpleaños 101, esta patriarca centenaria, residente en el Consejo Popular Perejil, del municipio Quemado de Güines, territorio de Villa Clara que cuenta con nueve centenarios, agradecía a la sociedad y a su familia por los cuidados proporcionados en el decursar de su existencia. Con un caudal de historias por contar, esta centenaria que vivió varias etapas de la historia y procede de una familia humilde que no tuvo la posibilidad de pagar sus estudios, asegura sentir sano orgullo por haber forjado su mejor herencia: una familia integrada por tres hijos, cinco nietos y cuatro bisnietos.

En la celebración de su onomástico acudían al humilde hogar, donde reina la alegría y la hospitalidad, vecinos y amigos que la admiran por sus virtudes; también familiares que a lo largo de su vida la han cuidado con esmero, entre ellas su hija Fefa, que le ha propiciado una mayor calidad de vida, pese a tener una deficiencia visual severa, que figura como su principal problema de salud.

En la celebración, Ester se sintío rebosante de alegría y para hacer extensiva la felicitación de los asociados del municipio, llegó al hogar Eladio More, presidente de la ANCI , para departir con una mujer que conserva una mente prodigiosa y sabiduría innata,  fruto de la experiencia que regalan los años vívidos. En la ocasión no faltaron para los presentes los sabios consejos Esther, mujer que es toda una enciclopedia y que que a su edad disfruta la buena música, las buenas amistades y sobre todo gusta de conservar su image y presencia personal.

Justo antes de la despedida agradecía a los presentes estar junto a ella en un día tan especial y con la mejor de sus sonrisas dibujada en su rostro, esta heroína y centenaria, aseguraba que en todos los años vividos, su mejor capital ha sido la honradez.