jueves, 16 mayo 2024

Pérdida de caña, un mal que lastra la economía

Recorrer los alrededores de las vías férreas en el municipio de Quemado de Güines,  deja bien claro cuánto nos falta por hacer en materia económica, y la imperiosa necesidad de seguir día a día combatiendo los males que lastran sectores tan vitales como la industria azucarera.

Recientemente ante un derrame de más de veinte toneladas de caña en un tramo de ferrocarril conocido popularmente  como Chucho el Cura, se  ponían en alerta y movilizaban a cuadros políticos del gobierno y personal de  la industria en el territorio, en aras de recuperar la cuantiosa cifra de caña botada. Desafortunadamente no se pudo aprovechar la demandada materia prima que por múltiples factores se derramó  en el trasiego hacia la industria del Quintín Banderas y no llegó a recibir el proceso productivo .

Este no es un asunto de esta contienda azucarera, año tras año la cifra de materia prima que no se aprovecha supera lo planificado. Solo en la actual zafra, en el Panchito Gómez Toro, se estima que más del veinte  por ciento de la gramínea no llega a su destino final,  por múltiples factores,  lo que afecta directamente la economía del sector y a los productores. Al indagar las causas, destaca el mal estado de las líneas de ferrocarril, de los coches que llevan el preciado renglón, pero también mucho depende de la voluntad de los hombres.

Ante la problemática que se presentó en el norteño municipio, los encargados de restaurar el tramo de vía férrea afectado se presentaron al lugar pero desafortunadamente el mal a los productores y a la economía ya estaba hecho y ni siquiera para la ganadería se pudo aprovechar la caña derramada por el alto contenido de acidez.

En materia económica ante asuntos tan apremiantes y sensibles como este, urge deslindar responsabilidades para encontrar los eslabones perdidos en la cadena productiva; urge mirar y mirar bien, para que en el trasiego de la caña desde el campo hasta la industria no se pierda la materia prima que proporciona el preciado grano,  que es imprescindible para endulzar la economía cubana.

Bien sabemos los que vivimos en esta heroica isla, cuánto el  bloqueo impide la entrada de recursos y debilita los frentes productivos, pero ello es muchas veces una justificación para tapar nuestras propias ineficiencias. Mucho queda por hacer para frenar el descontrol, la indolencia, las irresponsabilidades, conductas que pululan por doquier y son gangrena que carcome todo lo que en materia económica podemos avanzar.


Marcia Daniel Manrique

Periodista Licenciada en Educación 1999. Desde Quemado de Güines cuenta historias novedosas desde el norte de Villa Clara.

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