El orégano: ideal para cocinar y más

El orégano es empleado en la cocina porque proporciona sabor a los alimentos y un aroma peculiar que se intensifica con el secado de sus hojas. Al igual que otras hierbas, el orégano pierde su sabor con la cocción, por lo que es mejor añadirlo al final de la preparación.

También es utilizado en la medicina por sus múltiples propiedades. Esta hierba perteneciente a la familia de la menta, proviene de las palabras griegas oros (montaña) y ganos (alegría).

El orégano contiene fibra, hierro, maganeso, vitamina E, hierro, calcio, ácidos grasos omega, vitamina K. Además, el orégano, que algunas veces es llamado “mejorana”, contiene potentes fitoquímicos, los cuales ofrecen potenciales beneficios a la salud.

Cuenta con diversas propiedades que ayudan a nuestro organismo, entre las que destacan sus propiedades antioxidantes y antimicrobianas.

En la medicina natural austriaca se utiliza la infusión del orégano para el tratamiento de trastornos en el tracto gastrointestinal. Además, sirve para aliviar los síntomas de los resfriados y catarros, con sus hojas puedes preparar una excelente infusión.

Científicos de la universidad de Bonn en Alemania, identificaron un ingrediente activo en el orégano, conocido como beta-cariofilina (E-BCP), que puede ser útil contra trastornos como la osteoporosis y la arteriosclerosis.

Es fácil sembrar esta planta tan beneficiosa para nuestra salud y no necesita tener un patio de tierra; solo una maceta o un recipiente con tierra y cada día debe regarse.

Tener plantas de este tipo en casa resulta muy útil para emplearlas ante cualquier dolencia.