Villa La Granjita, por la cultura del detalle (+Fotos y audio)
En su aniversario 28, el hotel Villa La Granjita, perteneciente a Horizontes Cubanacán, apuesta por la cultura del datalle en cada uno de sus servicios.
En su aniversario 28, el hotel Villa La Granjita, perteneciente a Horizontes Cubanacán, apuesta por la cultura del datalle en cada uno de sus servicios.
Quien visita hoy Villa La Granjita, perteneciente a la cadena Horizontes Cubanacán, reconoce la excelencia del servicio y el coonfort de este hotel inserto dentro del turismo de naturaleza.
Fundada en agosto de 1991, La Granjita forma parte de la UEB Cubanacán de Villa Clara y compuesta por 4 instalaciones hoteleras (Sagua, Central, América, Los Caneyes y La Granjita).
Su principal objetivo consiste en el alojamiento hotelero con un diseño de productos que permiten hacer más placentera la estancia de los clientes que opten por permanecer en la instalación.
Para ello La Granjita diseña y ejecuta productos que se relacionan directamente con el entorno y las características propias de la institución, y sobre todo que representen realmente las prestaciones que el hotel promociona.
Se encuentra así un restaurante con servicio de buffet donde se ofertan platos internacionales y que cuenta con equipamiento moderno y una ambientación elegante, en función de un servicio formal y que armoniza con el propio diseño del enclave.
Como novedad, el complejo hotelero brinda también servicio buffet en un nuevo restaurante, inaugurado desde el 14 de febrero, pero de corte campestre. La Arboleda, que se distingue por el excelente trato, agilidad y profesionalidad en el servicio y una exquisita comida criolla con los sabores típicos de la culinaria cubana.
En el área de la piscina, que resalta por su limpieza y coonfort, ofrece servicio el snack-bar Los Naranjos, con profesionales con un amplio dominio de la coctelería y una parilla con una variada oferta gastronómica, también vinculada a la cultura culinaria cubana.
También en el área de la arboleda se encuentra un restaurante italiano cuya característica principal, además de la agilidad, consiste en el respeto hacia la gastronomía italiana; los platos que ahí se ofrecen se elaboran a partir de los pasos e ingredientes de la receta original mediterránea.
Estos servicios funcionan diariamente y simultaneamente, con una amplia demanda por parte del turismo que en sus diferentes modalidades hoy concurre a La Granjita.
La organización es un elemento que distingue al hotel, a decir de su subdirector Vladimir Méndez, y algo que también puede atestiguar esta periodista. “Históricamente el hotel ha contado con excelentes cuadros y mandos intermedios como chef y maître que conocen mucho del servico; los jefes de partida nuestros son muy profesionales y el hotel mantiene una tradición del buen hacer y de buenas prácticas a las que también se suman los jóvenes que cursan estudios en Formatur y que llegan al hotel en su período de prácticas”, afirmó Méndez.
La prioridad que tiene hoy La Granjita es la complacencia hacia sus clientes, y de ahí que en todo momento tengan en cuenta la opinión de quienes asisten a la villa que cuenta hoy con 90 habitaciones en servicio. Aunque la categoría del hotel es tres estrellas, posee cerca de una veintena de habitaciones con un alto standard, que emulan con las de hoteles de categoría cuatro y cinco estrellas, de ahí su presencia en el mercado alemán, francés y por supuesto, el nacional, que en temporada baja concurre durante la semana, y en la alta durante los fines de semana.
La Granjita, como parte de la estrategia de Cubanacán, hoy ha rediseñado sus precios y ofertas en función de hacer más accesible los servicios a la población, de ahí la variedad de paquetes turísticos.
Con un entorno tranquilo, La Granjita resulta excelente para el disfrute familar, y precisamente en función de esta característica, el hotel diseña su plan de actividades diarias.
Estas fiestas, con um precio de 5 cuc a consumir dos, se realizan también con variedad temática, en busca de imprimirles un atractivo diferente y sobre todo que rescate nuestra identidad, valores y cultura algo que solo ocurre en este hotel.
Los llamados pasadías también gozan de gran aceptación y se realizan diariamente en diferentes modalidades, que incluyen siempre la permanencia en la piscina y una variada oferta gastronómica; de acuerdo al table de productos alimenticios, se establece su precio.
El hotel cuenta con todo el personal de servicio y un amplio apoyo proveniente de Formatur y que se logra complementar con los trabajadores del hotel.
La Granjita también apuesta hoy por el turismo de eventos y ha servido de sede a muchas institucones para desarrollar encuentros científicos y empresariales, para lo cual cuenta con un salón dotado de tecnología moderna y una decoración formal y elegante, además de un servicio profesional excelente. A criterio del subdirector, “han sido capaces de asumir muchos retos y hasta ahora las referencias que tenemos a partir de la realización de eventos en el hotel, ha sido la mejor y eso nos complace mucho”.
Producto de la situación económica que vive el país, el hotel también se enfrenta a carencias, pero siempre se buscan alternativas que permiten continuar brindando el servicio. En este sentido destacan los contratos con los proveedores como Frutas selectas, la Empresa del Yabú, ITH y varias CCS. Además, el propio entorno natural del hotel rico en una variada vegetación y frutos tropicales certificados, posibilitan incorporar los mismos a la gastronomía que hoy ofrece La Granjita, lo cual ha sido de gran aceptación por los clientes y permite también sustituir importaciones.
Este servicio resulta hoy de gran importancia a partir de la cercanía del hotel con el SNU Abel santamaría. Con ello no solo aumentarían los ingresos, sino que se establecería un nuevo servicio para la comunidad aledaña a la zona, y que por su carácter periférico, no tiene acceso a los servicios de la ciudad.
“Nosotros no diferenciamos en el servicio hacia nuestros clientes, sea cual sea su nacionalidad -asegura Méndez-, quienes concurren al hotel han podido percibir este hecho. Esta instalación y sus trabajadores tienen esa premisa: al cliente hay que atenderlo y quererlo”.
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