Falleció un grande de la pelota cubana: Juan Castro

Sin duda alguna, Juanito, como le decían sus allegados, fue un maestro de la receptoría. Aún recuerdo sus “disputas” con otro señor de la posición, el villaclareño Alberto Martínez, para ver quién calzaba los arreos en el equipo Cuba, una “pelea” que la mayoría de las veces ganó el vueltabajero.

Este ganó innumerables títulos con la selección tricolor y con los conjuntos de su provincia en series nacionales y selectivas, en los que le recibió, de manera magistral, a los mejores lanzadores de la época y de todos los tiempos como Rogelio García, Julio Romero y el zurdo Omar Ajete.

Tras el retiro, el oriundo de San Cristóbal dirigió en los clásicos domésticos a Pinar del Río y a Sancti Spíritus, no con la misma suerte que cuando él jugaba y era una “fiera” en la receptoría.

Sin embargo, siempre fue una persona muy educada, humilde y correcta, al estilo de ese otro grande como es su mentor de toda la vida, Jorge Fuentes, del que mucho aprendió para su labor como mentor.

El intratable cáncer se ha cobrado otra víctima y relativamente joven, con solo 66 años. No obstante, este gigante pinareño, Juan Castro, nunca será olvidado por los amantes de la pelota en Cuba. Su técnica y elegancia insuperables siempre serán recordadas.