«El día está “cervezativo” y “aguardientoso?”, suspiró aquel barbero bayamés con la mirada hacia lo alto y la máquina de pelar en mano, cerquita de la cabeza de Israel Rojas, quien no dudó en pedir papel y tinta para anotar la frase. Era 2017 y Buena Fe estaba de gira.
Unos años más tarde, en 2023, la sabrosa descripción ha comenzado a sonar de boca en boca. La agrupación de más de dos décadas presentó ayer su decimotercer disco, Morada, y ahí está, como recuerdo de días felices, de esos que tenemos, al menos, Una vez al año.
Resulta que esta nueva propuesta es –en palabras de Rojas, director del grupo– «una especie de TBT», a la par que «una reverencia a la música como casa común de todos los habitantes del planeta», una muestra de respeto al patrimonio musical cubano, como es el caso de Las más viejas.
Amistad, picardía, identidad, cubanía, deslealtad y, sobre todo, amor, transitan por los 14 temas que componen este fonograma, en el que la incisiva pluma de Israel Rojas hizo de las suyas en todas las canciones. Incluida Café, cuya autoría compartió con el español Andrés Suárez, quien ya colaboró con el grupo en Volar sin ti, del CD Dial.
Por otra parte, esta producción es el resultado de la fusión, principalmente, entre la trova, el pop, el pop-rock y el son, amalgamados magistralmente con armonías típicas de nuestro panorama sonoro.
«Se parece a su tiempo, a estos días. Ha tenido que pasar por los sinsabores de la pandemia. Es un disco de mucho sacrificio. Dedicado a Cuba, a la casa, a lo que cada uno pueda sentir como su morada», subrayó Yoel Martínez, fundador de la banda.
Escuchar a esta agrupación es un consabido reto. Y Morada lo ratifica. Es el Buena Fe de siempre. El que no se va por el camino de la canción que cotiza ni se deja ahogar por el humo del odio mediático del que se han vuelto blanco constante. Para estos militantes del arte, el nuevo álbum ha sido «un ejercicio de crecimiento y madurez», aun cuando mantienen su sonoridad y las letras nos siguen llevando al análisis obligatorio, a la identificación con las temáticas que aborda.
Hijo de muchas manos, saberes, quehaceres, Morada, «el disco más colectivo que han hecho», según Israel Rojas, ya se encuentra disponible en las plataformas digitales de la Egrem. Y paulatinamente, en sus redes sociales, el grupo, publicará materiales relacionados con el fonograma. Asimismo, a partir del 14 de marzo, comenzarán una gira nacional para hacer de toda Cuba una morada musical.
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