Interpretación del lenguaje de señas: una carrera por la inclusión

Daniela Rajes optaba por rehabilitación física, pero por los azares de la vida inició en el primer año que abría la carrera de técnico superior en Interpretación de la lengua de señas cubana en la Facultad de Educación Infantil de la Universidad Central “Marta Abreu” de Las Villas. Llegó con expectativas difusas y sin comprender realmente cuál sería su función, ya en su segundo año confiesa que no se imagina en otra carrera.

A esta carrera se ingresa al terminar 12 grado sin realizar pruebas de ingreso. Posee un perfil lingüístico y a ese objetivo orienta su formación profesional con asignaturas que profundizan en el lenguaje de señas y la cultura e identidad de las personas sordas. Tiene una duración de dos años y medio aproximadamente y una vez graduada se ubican en diferentes instituciones de la sociedad como educación especial, el Ministerio de Salud o Justicia, los medios de comunicación entre otros, explica Adriana Yánes, jefa de la carrera.

Con un perfil ocupacional de mediadores lingüísticos entre personas sordas y oyentes, esta carrera se orienta hacia la necesidad de un profesional que facilite la interacción en servicios claves en la sociedad cubana. En la actualidad 9 estudiantes integran los dos grupos de la carrera en la provincia, y se vinculan directamente con la ANSOC para facilitar sus prácticas docentes y la interacción con la comunidad sorda de manera que no solo aprendan lenguaje de señas, también se identifiquen con ellos y sus problemáticas.

El claustro de profesores incluye personas sordas y oyentes que facilitan el proceso de enseñanza-aprendizaje, tal es el caso de Delvis Hernández Gallosa, miembro de la comunidad sorda que ha logrado enamorar a estas jóvenes por una carrera que considera útil y necesaria. Sus manos y gestos les permiten aprender un lenguaje al que llegaron sin muchos conocimientos previos, pero les ha sorprendido la capacidad para comunicarse y ser útil.

“Atiendo esta especialidad en la asignatura Lengua de Señas que es bien importante para, en un futuro, preparar a las intérpretes para los diferentes servicios hacia la comunidad sorda y continúen con más calidad los intérpretes y puedan romper las barreras de comunicación entre la comunidad sorda y la oyente” añade Delvis Hernández.

Existen en el mundo más de 300 lenguas de señas que exigen un conocimiento más amplio dentro de las sociedades. Los nueves estudiantes de la carrera Interpretación de la lengua de señas cubana en Villa Clara, sueñan ya con sus futuros profesionales, serán mediadoras lingüísticas y defenderán una lengua en la aspiración de un país más inclusivo.