Miedo al Viernes Trece

El mítico y enigmático viernes trece resulta un tema recurrente. Esta es una fecha que se considera de mala suerte en muchas de las culturas occidentales. El miedo a este día se popularizó a nivel mundial debido a una de las sagas más terroríficas de todos los tiempos en el séptimo arte y que lleva por nombre precisamente Viernes 13.

Si bien la primera de las películas da una interpretación del origen del mal augurio de un viernes trece, sobre las desgracias ocurridas en un campamento de verano y crea al terrorífico Jason Voorhees, la historia en occidente nos cuenta su propia versión.

El trece de octubre de 1307, casualmente viernes, la Orden de los Caballeros Templarios fue perseguida por la Santa Inquisición bajo las órdenes del Rey Felipe IV de Francia. Una vez capturados la mayoría de ellos fueron juzgados y condenados a morir en la hoguera.

Existen personas estudiosas de las investigaciones que aseguran que esta fobia se debe más al evento de persecución y eliminación de los templarios, que con el paso de los años continúa causando polémica por lo oculto de las circunstancias en que se produjo.

No obstante, tanto la saga como la historia occidental hacen del último día de la semana y del décimo tercer día de cualquier mes, veinticuatro horas para algunos tomarlo con mucho respeto y hasta cierto temor, para otros como una jornada más dentro del calendario.