sábado, 27 abril 2024

¿Por qué votamos? (I parte)

Cuba está precedido por medidas que atenazaron el bienestar colectivo, pero ante las cuales no sucumbimos, a pesar de las predicciones de ciertos profetas de la campaña de guerra sicológica.

de no subsidiar más al régimen cubano. Cuba tendrá que adaptarse a la pérdida del 30 % o más de sus importaciones de petróleo fuertemente subsidiadas, y eso significa permitir una economía más basada en el mercado».

Otro golpe había llegado poco antes desde Brasil, cuando a fines de 2018 el Gobierno de Jair Bolsonaro canceló un acuerdo por el que 11 000 médicos cubanos trabajaban en ese país, y que aportaba un estimado de 400 millones de dólares anuales a Cuba.

Sin embargo, en junio de 2019, aún en la Isla seguían inadaptados a lo que el Gobierno de Trump pretendía y sus cercanos compañeros que escriben en la gran prensa internacional tendrían razones para desesperarse: el nuevo Gobierno de Miguel Díaz-Canel subía pensiones y salarios del sector presupuestado, congelados por largo tiempo, y a pesar de enfrentar el impacto de las sanciones a las navieras que transportaban combustible a Cuba, que provocó tensiones en el abastecimiento a gasolineras y transportes durante varias semanas del segundo semestre, se logró capear el impacto en el transporte público en un tiempo no muy extenso. Antes, en otra muestra de resiliencia, surgían nuevos servicios de taxis colectivos en La Habana y ferrocarriles nacionales; mientras, a fines de ese año, la capital cubana celebraba por todo lo alto su aniversario 500.

Viéndose, como anunciaron los funcionarios de Trump, en la necesidad de gastos no previstos para invertir buena parte de sus divisas en adquirir el combustible que antes recibía de Venezuela, la economía cubana tampoco colapsó entonces.

Cinco años después de la doble agresión con «sanciones directas» (a Cuba) e «indirectas» (vía Venezuela), funcionarios de Trump dixit, lo anunciado desde El País y Radio y TV Martí –¿o serían parte estos proféticos seres del componente sicológico de la misma guerra?– continuaba sin cumplirse.


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