El cederista mayor

En el mismo corazón del Consejo Popular El Perejil, en su natal Quemado de Güines, se ubica el CDR que ayudó a fundar Chelo. Desde entonces, el móvil de su trabajo fue involucrar a todos sus vecinos en función de la consolidación de un movimiento, que desde el barrio, fuera garante en preservar las conquistas de la naciente sociedad, impulsar el trabajo comunitario y la vigilancia cederista, entre otras tantas tareas.

Con noventa y dos años recién cumplidos, Marcelo continúa activo en las tareas de la organización a la que le ha puesto alma, corazón y vida por más de cincuenta años. Así manifestaba este cederista fundador que en estos duros días de pandemia se ve limitado en salir de casa por tener una avanzada edad, pero ello no le impide esperar la celebración del aniversario sesenta y uno de los Comité de Defensa de la Revolución, vigilante desde casa, en compañía de su familia.

Con claridad meridiana, Marcelo recuerda cada etapa de su vida dentro de la organización en la que se desempeñó como dirigente de base por más de diez años; participó de manera activa en los distintos procesos del Poder Popular que se han realizado en Cuba, en el más reciente Referéndum Constitucional o acompañando en programas tan sensibles como trabajos voluntarios, donaciones de sangre y otras tantas tareas en beneficio del barrio, su patria chica. Fe de la destacada trayectoria de este quemadense de hablar pausado y principios probados, lo dan sus múltiples diplomas y reconocimientos que conserva con sano orgullo.

Una de las mayores inquietudes de Marcelo, un cubano que es historia viva dentro la mayor organización de masas del país, ha sido cómo asegurar un relevo generacional que de continuidad a su trabajo en el seno de la comunidad. Con este fin constituyó el CDR infantil, que agrupa a niños de diferentes edades a los que involucra en cada actividad que se realiza en el barrio, entre ellas destacan higienizacion de las áreas verdes, patrullas para incentivar el ahorro de energía y estímulo a familias destacadas.

Es Marcelo un cederista y cubano por excelencia, que regala a la más nueva generación la sapiencia de los años vividos, mientras inculca valores y principios de la organización, que desde el barrio, es columna vertebral en defensa de las conquistas sociales.