martes, 26 marzo 2024

Un cuidado que debe ser permanente

Desde 1974, cada año el 5 de junio se celebra el Día Mundial del Medio Ambiente con la participación de gobiernos, empresas y ciudadanos, en un esfuerzo por abordar los más apremiantes problemas ambientales que afronta la humanidad.

Se instituyó este día con el objetivo de contribuir a crear conciencia acerca de la necesidad de proteger y mejorar el medio ambiente, en recuerdo a la apertura de la Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Medio Humano (Estocolmo, 1972), reunión en la que se aprobó el Programa de las Naciones Unidas con este fin.

En esta jornada de celebración, se realizan, desde su surgimiento, múltiples actividades: concentraciones en calles, conciertos ecológicos, ensayos y competencias de afiches en escuelas y colegios, plantaciones de árboles, campañas de reciclaje y de limpieza, entre otras, sin embargo, hace casi dos años todo cambio como resultado de la pandemia que azota al mundo y las mayores acciones se realizan online.

Cuba no está exenta de esta situación y Villa Clara como provincia tampoco. En la revista especial en tiempos de pandemia que trasmite cada mediodía Telecubanacán, especialistas en el cuidado de nuestro entorno explicaron los logros del territorio ante el cuidado del medio y lo que aún falta porque esta es una tarea de todos los días.

Domingo Ballarte, director de actividades de conservación de flora y fauna de Villa Clara, aseguró que una de las actividades fundamentales desde hace más de 30 años de la Empresa de Flora y Fauna del territorio es la restauración de ecosistemas degradados. Con diferentes técnicas pasivas y activas hemos trabajado en esas áreas para restaurarlas y con ellas también hemos vinculado a las comunidades villaclareñas.

Existe una zona del municipio de Corralillo con la cual se ha trabajado en un proyecto con 18 años de creado- continúo Ballarte- en el Monte Ramonal, una reserva florística natural. Un proceso primero investigativo y posterior de acciones han logrado rescatarla. De una zona perdida en marabú a lo que hoy se exhibe muestra la labor que allí se realiza cada día, hoy son áreas boscosas que ya actúan como ecosistemas naturales, acotó Ballarte.

“Era un área muy antropisada, o sea, maltratada por el hombre, por tanto le corresponde también al hombre su rescate y conservación, y comenzamos a trabajar con una educación ambiental en su comunidad. Los niños desde la escuela trabajan en su rescate e implican a sus familias, señaló el director de actividades de conservación de flora y fauna de la provincia.”

Todo este trabajo logró que ya más de 250 hectáreas de Monte Ramonal estén restauradas, aseguró el especialista. Las antiguas áreas de marabú hoy son bosques con otras funciones, incluidas que traen también otros beneficios a las comunidades cercanas que va desde la conservación del medio, hasta una fuente inagotable fuente de empleo y de producción de alimentos.

Hoy en esa zona existe equilibrio ecológico y también económico para los que allí viven, concluyó Domingo Ballarte. Plantaciones de piña y de árboles han caracterizado a la zona desde que se trabaja en el proyecto de restauración en ella.

También desde las costas y muy ligado a la “Tarea Vida”, se trabaja en la conservación y cuidado del ecosistema, aseveró Luis Orlando Pichardo Moya, especialista de estudios ambientales de Villa Clara.

Existen varios proyectos internacionales – continúo Pichardo – para este fin, y se desarrolla en Caibarién con replica en otras zonas costeras del territorio y otras tres provincias más. Proyectos de adaptación basado en ecosistemas y adaptación basado en comunidades, rehabilitación de patios y organopónicos, etc.

En estos proyectos se implican otros organismos al ser Caibarién una zona muy expuesta la penetración del mar, acotó Pichardo. Tiene este proyecto como colofón, la restauración de los manglares como refugio de los barcos en tiempos de huracanes. En todos estos proyectos se implica a la comunidad con muy buenos resultados.

Existen otros proyectos vinculados a este fin que se ponen en práctica en Caibarién y todos encaminados al cuidado y conservación del medio ambiente, que debe ser una tarea permanente, concluyó Luis Orlando Pichardo Moya.


Eleonora María Flores Pedraza

Periodista Licenciada en Historia y Ciencias Sociales 1984, muestra interés por el periodismo y los problemas de la sociedad.

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