jueves, 28 marzo 2024

En detalles, avances de los candidatos vacunales cubanos

Para informar sobre el inicio de la Fase III de Soberana 02, los preparativos de la Fase III de Abdala y otros detalles de interés sobre los candidatos vacunales cubanos contra la COVID-19, directivos de Biocubafarma, el Instituto Finlay de Vacunas, el Centro de Ingeniería Genética y Biotecnología y el Instituto de Medicina Tropical Pedro Kouri participaron este viernes en la Mesa Redonda.

Cuba posee cinco candidatos vacunales en desarrollo clínico

La entrada del primer candidato vacunal (Soberana 02) a la tercera fase de ensayos clínicos, tras la aprobación de la agencia regulatoria cubana, es un hito importante, convirtiéndose en la primera vacuna desarrollada en América Latina en llegar a esta etapa, destacó al iniciar su intervención en el programa televisivo el Dr. Rolando Pérez Rodríguez, director de Ciencia e Innovación de BioCubaFarma.

“Esperamos que en el mes de marzo el candidato vacunal Abdala reciba la autorización de la agencia reguladora para iniciar esta fase”, dijo.

Pérez Rodríguez comentó que Cuba posee cinco candidatos vacunales en desarrollo clínico: Soberana 01, Soberana 02, Abdala, Mambisa y Soberana Plus, de reciente incorporación. Esta última es una de las formulaciones evaluadas en el proyecto de Soberana 01, “pero que se desarrollará como una vacuna de refuerzo y se utilizará en pacientes convalecientes o en combinación con otras vacunas”.

El programa de vacuna de Cuba comenzó en mayo de 2020 y los estudios clínicos comenzaron en agosto. En este período se han logrado avances sustanciales, destacó el doctor, tomando en cuenta la entrada de un candidato vacunal a la fase tres y otro que se prevé pase a esa etapa en este mes.

Hasta la fecha se han vacunado tan solo el 2,13% de la población mundial

Sobre el desarrollo de vacunas en otros países, el doctor explicó que existen 308 candidatos vacunales, de ellos 81 en ensayos clínicos y 16 en fase tres. “De manera que Soberana 02 y Abdala serían los candidatos 17 y 18 en comenzar la fase III de ensayo clínico a nivel mundial”.

Excepto los candidatos de India, una economía emergente, y China, el resto de los que se encuentran en esta fase pertenecen a las grandes trasnacionales de países desarrollados.

Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), 15 vacunas cuentan ya con registros sanitarios o autorización de uso de emergencia. “En general, las vacunas aprobadas tienen un esquema de dos dosis, aunque se evalúan otras con esquema de tres dosis”.

Hasta el cuatro de marzo se han administrado en el mundo 284 millones de dosis de vacunas, y han recibido al menos una dosis, 166 millones de sujetos (en 81 países), lo que representa un 2,13% de la población mundial.

Reportan que 60 millones de personas han recibido el ciclo completo de inmunización, lo que representa un 0,78% de la población mundial. “Se trata de un desafío enorme, porque cortar la transmisión del virus en el mundo implica una cobertura grande de la población total vacunada”.

Las primeras evidencias del impacto de la vacunación en el control de la pandemia se han obtenido en Israel, país pequeño que ya tiene un porcentaje relativamente alto de su población vacunada, comentó Pérez Rodríguez.

Los primeros datos de efectividad de esta vacunación masiva indican que se logra reducir del 66 al 85% los casos positivos a la COVID-19, mientras que los casos graves y críticos se reducen en un 90%. “Habrá una reducción clara de la letalidad, pero aún no está muy claro el impacto que habrá en la transmisión”.

“Debemos entender que las vacunas llevan mucho tiempo para evaluarse, porque es necesario ver la protección a largo plazo y cuánto dura la inmunidad. Pero ante la urgencia de desarrollar las vacunas para enfrentar la pandemia se ha tenido que acelerar todo el proceso”.

El doctor argumentó que se siguen acumulando evidencias y se generan nuevos conocimientos durante la extensión de estas vacunas, que permitirán ir perfeccionando las estrategias de inmunización en los próximos meses.

¿Cómo se llega a la fase tres de ensayos clínicos?

¿Cómo se llega a la fase tres de ensayos clínicos? Pérez Rodríguez puntualizó que se hace un primer ensayo pequeño que mide esencialmente la seguridad e inmunogenicidad del candidato. Después, el ensayo fase II amplía las evidencias de seguridad y permite comprobar que esa respuesta inmune tiene una funcionalidad.

El criterio utilizado, equivalente a esa inmunidad protectiva, es la inducción de anticuerpos neutralizantes.O sea, se hace una prueba de laboratorio donde se usan células en cultivo que se infectan con el virus, así como se utiliza el suero de los pacientes vacunados. “Si ese suero tiene anticuerpos que impiden que el virus puede infectar las células, entonces es porque hay anticuerpos neutralizantes”. 

En la práctica, en las vacunas que han llegado a fase III y que han demostrado eficacia, se ha confirmado que inducen anticuerpos neutralizantes, equivalentes a los anticuerpos que existen en pacientes convalecientes. “Cuando uno enferma se desarrolla una inmunidad natural contra el virus, y eso es lo que permiten las vacunas”.

“Los conocimientos generados previamente permiten que los proyectos que se están desarrollando, que entran en fase III, si tienen una fase II en la que se logra demostrar que se induce respuesta de anticuerpos neutralizantes similar a los pacientes convalecientes, entonces es probable que la vacuna tendrá efectividad en reducir la tasa de incidencia de la enfermedad de pacientes graves y críticos”, detalló Pérez Rodríguez.

Argumentó que las vacunas que obtuvieron una autorización de uso han mostrado una eficacia entre un 70 y 90%, quiere decir que reduce la tasa de incidencia de la enfermedad en ese porcentaje. No obstante, la OMS plantea que una reducción de hasta 50% sería de utilidad, porque tendría un impacto en el manejo de la enfermedad y por tanto sería reconocida por esta organización.

“No hay forma de vacunar a toda la población mundial con unos pocos candidatos vacunales, por eso es necesario continuar el desarrollo de diferentes vacunas. Siempre que existan vacunas con más de un 50% de eficacia, la variedad ayudará a controlar la pandemia a nivel global”.

El experto explicó que en el desarrollo de los proyectos se ha ido “sobrelapando las fases de ensayos clínicos”. “En la fase I, por ejemplo, una vez que se tiene las evidencias de seguridad y las primeras evidencias de inmunogenicidad, se solicita pasar a la fase II aunque continúe el seguimiento de pacientes, semanas o meses, para ver si aparecen reacciones tardías adversas”. 

La agencia reguladora cubana ha exigido el cumplimiento estricto de todas las regulaciones con el objetivo de garantizar la seguridad de los voluntarios y que existan todas las evidencias que posibiliten el tránsito hacia la fase siguiente.

También se ha seguido las recomendaciones de la OMS y las diferentes agencias reguladoras del mundo.

Las publicaciones de los resultados de los ensayos cubanos ya empiezan a aparecer. Se han ido tomando las decisiones de tránsito, pero en cada fase continúan los exámenes y análisis de laboratorios para completar todos sus requerimientos técnicos.

Por ejemplo, hay una de Soberana 02, con todos los datos preclínicos; otra con los resultados del ensayo clínico fase uno con Soberana Plus. También se preparan las publicaciones de los resultados de las fases uno de Soberana 01, Soberana 02, y Abdala.

“En las próximas semanas irán apareciendo las publicaciones, es un proceso que no parará, pero que ha llevado tiempo para completar la data necesaria para que la publicación fuera lo suficientemente convincente”, destacó.

Soberana 02: Principales resultados

Sobre el paso de las vacunas a la Fase III de ensayos clínicos, la Dra. Dagmar García Rivera, Directora de Investigaciones del Instituto Finlay de Vacunas, rememoró la evolución de Soberana 02 durante nueve meses de intenso trabajo.  

Recordó que, en mayo de 2020, Cuba comenzó a definir cómo sería la vacuna. “Luego, el 24 agosto comenzamos el primer ensayo clínico con dos formulaciones de Soberana 01. En octubre, Soberana 02 inició su fase I, en diciembre la fase II y el 3 de marzo recibimos la autorización de la fase III para demostrar eficacia clínica”.

Esto ha sido posible por varias razones señaladas en otras oportunidades. Ha sido de vital importancia la alianza estratégica organizada entre muchas instituciones del país, tanto de Biocubafarma como del Ministerio de Salud Pública (Minsap). 

“Si no hubiera sido porque cada institución puso su mejor capacidad científico tecnológica en función de las vacunas, no hubiéramos podido avanzar tanto en solo 9 meses”, destacó la investigadora.

Respecto a la organización de cada fase, comentó que la primera de ellas tuvo a 40 sujetos, la segunda a 910 y la tercera, inicia en La Habana con 44 mil personas. Esta ampliación de las muestras está directamente relacionada con la seguridad de los candidatos vacunales.

“Aunque trabajamos sobre una plataforma ya conocida y probada, es de rigor probar la confiabilidad durante cada fase”, insistió.

En tal sentido, refirió que de los 40 sujetos que tomaron parte en la fase I, 16 reportaron algún evento adverso leve, sobre todo enrojecimiento o dolor en el área de la vacunación. En el caso de la fase II, el 59.4% refirió un evento adverso, aunque en el 40% de ellos solo fue dolor leve en el sitio de vacunación. En ninguna fase se reportan reacciones graves.

Por otra parte, en lo relativo a la inmunogenicidad, durante la fase I el 84% de los sujetos se consideraron “respondedores”. 

A partir de esos indicadores, se decidió aplicar una tercera dosis dividiendo la muestra en dos grupos: a la mitad se le puso Soberana 02 y al resto Soberana Plus. Después de esta tercera dosis, la totalidad de los sujetos son “respondedores” y el 90% desarrolló anticuerpos contra el virus. Entre el 60 y el 65% también demostró respuestas específicas a las células T.

Durante la fase II, después de dos dosis de la vacuna, el 81% de las personas tuvieron una respuesta positiva, un indicador que sube al 96% después de la tercera dosis. De igual modo, el 76% desarrolló anticuerpos neutralizantes tras la segunda dosis.

 “Sobre la base de estos resultados solicitamos la autorización para comenzar la siguiente etapa con este candidato”, destacó García Rivera.

La especialista apuntó que, durante cada etapa del proceso, los desarrolladores no tomaron parte en el procesamiento de las muestras de los sujetos en estudio. “Esta evaluación externa significa una fortaleza de cara a la auditoría y reconocimiento de esta vacuna a nivel internacional”, agregó.

Abdala: A las puertas de la Fase III

Junto a Soberana 02, el desarrollo del candidato vacunal Abdala abre puertas para el combate contra la COVID-19.  Al respecto, la Dra. Verena Muzio González, directora de Investigaciones Clínicas del Centro de Ingeniería Genética y Biotecnología (CIGB), explicó que se basa en la misma plataforma utilizada para crear la vacuna recombinante contra la Hepatitis B.

“En solo tres meses hemos desarrollado las fases I y II, gracias también a la colaboración entre las entidades científicas”.

Los estudios se diseñaron para probar dos esquemas de vacunación: uno largo y uno corto. El esquema corto incluye tres dosis cada 14 días, mientras que el largo implica recibir la vacuna cada 28 días.

“Esto lo hicimos no solo para probar la eficacia del fármaco, sino para evaluar dos niveles de dosis y tener alternativas ante posibles cambios. Entonces descubrimos que en el esquema corto los mejores resultados los tuvieron las altas dosis”, explicó la investigadora.

Se demostró también que más del 60% de las personas desarrollaron niveles de inhibición. Al terminar la tercera dosis, el 95% tenían anticuerpo incrementados más de cuatro veces en relación al momento del inicio del estudio. “Con estos resultados propusimos comenzar el ensayo en fase III”.

Cuba cuenta con 320 mil dosis de Soberana 02

En otro momento de la emisión, la Dra. Dagmar García Rivera informó que el país ya cuenta con 320 mil dosis de Soberana 02, dividida en tres lotes. Cada parte del proceso —dijo— tiene la inspección de las autoridades reguladoras, lo que fortalece la voluntad de no comprometer cualquier parte del proceso.

La Habana será la sede de los estudios de fase III de Soberana 02, una experiencia que implica una alta organización y el apoyo de instituciones científicas y universidades. En tal sentido, la especialista apuntó que el proceso ocurre en ocho municipios de la capital.

“Esto no no implica que ya empezó la vacunación”, precisó.

Asimismo, elogió el papel de los jóvenes universitarios en el procesamiento de la información y en la coordinación de procesos.  Nuestro propósito es convertir a La Habana en un gran sitio clínico para Soberana 02, concluyó.


Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *