jueves, 28 marzo 2024

Trump alista sepultura del Estado palestino

El jefe de la Casa Blanca examinará detalles de su proyecto con el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, y el principal líder opositor Benny Gantz
Trump y Netanyahu, con la proclamación sobre las Alturas del Golán en marzo de 2019. Autor: AFP
Trump y Netanyahu, con la proclamación sobre las Alturas del Golán en marzo de 2019. Autor: AFP

El presidente Donald Trump da los toques finales esta semana al anuncio de su llamado «Acuerdo del siglo» para Oriente Medio, que excluye la creación de un Estado Palestino, tal como reclama la comunidad internacional.

El jefe de la Casa Blanca examinará en Washington los detalles de su proyecto con el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, y el principal líder opositor, general retirado Benny Gantz, quienes medirán fuerzas en una tercera ronda electoral el 2 de marzo.

La iniciativa de Trump que sería divulgada el martes, denominada en inglés Deal of the Century, tiene más de «negocio» que de «tratado», ya que se fundamenta en un quimérico plan multimillonario de inversiones que aumentaría los ingresos en los territorios palestinos, pero que seguirán bajo control político-militar israelí.

Más aún, la propuesta elaborada por su yerno y asesor, Yared Kushner, quien sobresale por su activa militancia a favor de Israel, admite y legaliza la anexión por el Estado israelí de todas las colonias judías establecidas en Cisjordania y Jerusalén, ocupadas militarmente en 1967.  

Unos 620 000 colonos israelíes habitan en alrededor de 200 asentamientos militarizados, que forman un tejido que anula la unidad geográfica de Cisjordania y tiende a judaizar de manera progresiva Jerusalén.

Como un nuevo paso en la extinción progresiva de todo sueño con un Estado Palestino independiente, tanto Netanyahu como Gantz prometen ahora a su electorado anexar el Valle del Jordán, una zona agrícola y estratégica que representa alrededor del 30 por ciento de la superficie de Cisjordania ocupada.

Gantz, líder del partido Blanco y Azul, autodenominada agrupación de centro-derecha, aceptó la invitación de Trump de ir a Washington, tras expresar algunas reservas, por considerar que el anuncio del presidente estadounidense antes de las elecciones israelíes beneficiaría a Netanyahu, su favorito y aliado.

Sin embargo, el exgeneral aceptó el convite el sábado último, luego de anunciar al electorado que —así como Netanyahu— él también promoverá la anexión del Valle del Jordán, una fértil franja de terreno de Cisjordania, que debe ser parte del Estado Palestino.

Por su parte, Trump proclamó la «legalidad» de la anexión y rompió la política jurídica adoptada por los gobiernos precedentes de Estados Unidos desde 1978, que consideraba «ilegal y sujetos a devolución los territorios de Gaza, Cisjordania y Jerusalén Este», ocupados por Israel en la guerra de junio de 1967.

Asimismo, ha reconocido de hecho y en más de una ocasión a Jerusalén como única e indivisible «capital» de Israel, y se pronunció a favor de la anexión de las Alturas del Golán sirio, en otro desafío al derecho internacional.

La Autoridad Nacional Palestina, encabezada por Mahmoud Abbas, al igual que organizaciones políticas y populares expresaron desde hace meses su rechazo al plan de Trump, tan pronto conocieron sus líneas.

El mandatario estadounidense tampoco se molestó en invitar a Abbas o a cualquier otra organización palestina a los encuentros en Washington, lo que revela su proyecto como un «buen negocio» que se trata de imponer, con el apoyo de Israel y algunos regímenes árabes afines a su política.

En declaraciones a reporteros en Washington, este lunes, Trump dijo que los palestinos podrían reaccionar negativamente a su plan en un primer momento, pero que «es muy positivo para ellos», sin dar otro detalle. «Es un gran plan que va a funcionar», subrayó.

El vacío de sus expresiones y el modo en que ha cubierto las apetencias territoriales, jurídicas y financieras de Israel, Estado al que el presupuesto de este año asigna más de 3 000 millones de dólares en ayuda no rembolsable,  expresan de modo claro a quién puede beneficiar su controversial «negocio del siglo»./Leonel Nodal


Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *