Buen cierre de año para el balonmano femenino cubano

La selección cubana ganó sus dos últimos partidos en la justa mundialista después de cinco derrotas consecutivas en la fase de grupos ante Noruega, Holanda, Serbia, Eslovenia y Angola respectivamente.

En la discusión de los lugares del 21 al 24 derrotó con amplia pizarra de 45-25 a Australia con siete goles de Lorena Téllez y Shakira Robert respectivamente, mientras Yarumy Céspedes y Nahomi Márquez marcaban seis dianas cada una.

El partido final por el puesto 21, que igualaría su actuación de Noruega-Dinamarca 1999, las enfrentaría a Kazajistán en un partido trepidante. El duelo terminó empatado a 29  goles en el tiempo reglamentario cuando Cuba llegó a tener una ventaja de 21-17.

En los penales, Cuba derrotó a las asiáticas cuatro goles por dos. La portera Indiana Cedeño se convirtió en la heroína del encuentro, al parar primero un penalti a Mariya Sitnikova, y luego salvando magníficamente con su pierna izquierda extendida contra Valentina Sitnikova.

El mismo día de la victoria trascendió que la portera Niurkis Mora fue escogida como la mejor atleta del año de Cuba en deportes colectivos debido, en gran medida, a su actuación en el torneo Norca donde consiguieron el cupo mundialista, y en la cita panamericana de Lima.

Cuba regresó al podio en Lima 2019 con una disputadísima presea de bronce después de doce años sin obtener una medalla.

Nuestro país ya cuenta con seis atletas contratadas en ligas europeas, después de incorporarse este año la jovencita de 19 años Nahomi Márquez al Ariosto Pallamano Ferrara de la liga italiana.

Lisandra Lussón, Yuni Camejo, Lorena Téllez y Gleinis Reyes militan en clubes españoles  mientras que Eyatne Rizo lo hace en el Fleury Loiret francés.

Este torneo del orbe pudiera abrirles las puertas de contratos a  varias jugadoras jóvenes como Jennifer Toledo de apenas 19 años, Liliamnis Rosabal con 20 así como Yarumy Céspedes y Shakira Robert, ambas de 23 años. El 2019 fue un año de crecimiento para el balonmano femenino cubano. Varios deportes colectivos debieran mirarse en el espejo de esta disciplina, que mantiene un trabajo sostenido y continuo con frutos palpables en materia de contrataciones y resultados.