Arlen López: Bronce sobre el ring en París

Minutos más tarde, el sueño de Arlen de tres oros olímpicos vería su final. El guantanamero luchó con todas sus fuerzas, pero no fue suficiente: cayó 3-2 ante Oleksandr Khyzhniak.

Khyzhniak era un rival de consideración. Había sido medallista de plata de peso mediano (75 kg) en los Juegos Olímpicos de Tokio 2020 y no había dejado dudas en los combates anteriores.

Aunque Arlen dominó cuatro de las cinco tarjetas en el primer asalto, el ucraniano empató las acciones en el segundo. Finalmente, en el tercero, el criollo sucumbió ante la potencia de Khyzhniak y vio desvanecerse la posibilidad de igualar una hazaña solo conseguida por dos gigantes como Teófilo Stevenson y Félix Savón.

Arlen no pudo contra su rival. Foto: Ricardo López Hevia/Granma.

“Paso a paso”, había dicho Arlen hace unos días, prefiriendo asumir el reto de cada combate sin cargar con el peso de una corona.

Apenas el viernes, Arlen había derrotado al uzbeko Turabek Khabibullaev en una ajustadísima pelea. El guantanamero tuvo un rival de consideración, un joven de 20 años que lo superaba en alcance y lo hizo sudar hasta el final, tal como demuestran las votaciones de los jueces.

Los últimos minutos de Arlen sobre el encerado fueron como una despedida. Beso al suelo y se llevó la mano al corazón, consciente de que su sueño olímpico había llegado a su fin. Monarca de Río 2016 y Tokio 2020, ahora sale del cuadrilátero con la certeza de haber dejado una huella imborrable en la historia del boxeo cubano.

El boxeo cubano se despedirá de París con solo dos medallas. Foto: Ricardo López Hevia.